La relación entre objetivos y competencias:
Los objetivos educativos son la meta que debemos fijar los docentes para que tanto alumnos como profesores, consigan desarrollar las competencias que recoge la LOE.
El modelo educativo actual, no pretende que el alumnado se conforme únicamente con superar los objetivos educativos, sino que el fin último es desarrollar unas competencias en el alumnado, para así conseguir desarrollar una serie de habilidades mucho más ricas de las que se podrían adquirir en la mera superación de objetivos. Ahora se trata no sólo de “aprender algo”, sino de conseguir un alumnado capaz de “hacer algo” ante posibles situaciones problemáticas que se puedan plantear en la vida real. Y para el desarrollo de dichas competencias es necesario contemplar el carácter interdisciplinar en la enseñanza actual.
La relación entre objetivos y evaluación:
Una competencia necesitaría de una evaluación extensísima, que tuviese en cuenta matices que no tienen cabida en un aula, lo que la haría complicada e ineficiente. Por ello es preferible centrarse en casos delimitados y sin ambigüedades, es decir, evaluar el logro del objetivo propuesto.
Para una correcta evaluación de los objetivos, es necesaria una formulación explícita, clara y cuantificable de los objetivos, previa al proceso de evaluación, para que exista feedback entre alumnado y profesorado y se sepa desde un principio cómo se les va a evaluar. De esta forma se pretende mejorar el proceso de aprendizaje.
La secuenciación de los objetivos:
No cabe ninguna duda de que si se sigue la jerarquía de niveles que estableció Benjamin Bloom, se conseguirá que los objetivos se cumplan. Pero en la vida real, hay muchos casos, en los que se puede aprender sin necesidad de haber conseguido lo anterior para poder alcanzar ciertos objetivos. La experiencia demuestra como en numerosas situaciones es posible realizar una magnífica labor procedimental (bien sea por aprendizaje de forma mecánica, por ensayo-error, etc), y sin embargo no tener ningún conocimiento previo a la labor que se está desempeñando.
¿Qué tipo de objetivos son especialmente adecuados para las prácticas (talleres)?
En el caso de las prácticas (talleres) encontramos sobre todo objetivos procedimentales y en menor medida, objetivos conceptuales y actitudinales.
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